En enero de 2010, el programa lanzó una expedición exploratoria con el objetivo de comenzar recopilación de datos a largo plazo en el volcán más alto del mundo, Ojos del Salado, de 6.893 mt de altura y la altiplanicie circundante, la Puna. La importancia de la investigación radica no solamente en la ubicación misma y su entorno extremo, sino también en que es la medición medioambiental y climática a largo plazo jamás lanzada a tal altitud en la Tierra.
Es de conocimiento común que esta área es un entorno extremo, pero los principales factores causantes de su extremidad aún no se han descubierto, lo que motiva principalmente esta investigación. Los datos y análisis de este proyecto de monitoreo a largo plazo nos brindan información esencial sobre los parámetros ambientales, a su vez los cambios observados nos entregan indicios sobre la dinámica del cambio climático y sus consecuencias. La locación es la parte árida de los Andes (el macizo montañoso más árido y más alto del mundo), donde volcanes extintos e inactivos se elevan por encima de los 6.000 m s. n. m., haciendo de esta zona uno de los lugares más extremos de la Tierra. Sin embargo, no hay datos exactos disponibles sobre los cambios medioambientales y climáticos, ni sobre sus efectos en este desierto de altura deshabitada, caracterizada por salares, falta de glaciares, agua dulce permanente, escasa vegetación, vientos fuertes permanentes y tormentas de polvo. El causante podrían ser las condiciones climáticas extremas y el terreno difícil y de gran elevación.
La locación es representativa de los Andes secos/áridos, tiene una accesibilidad relativamente buena y la diferencia de elevación entre la meseta y la cumbre permite estudiar la presencia de criósfera una amplia sección de altitud (entre 4.200 y 6.893 m.s.n.m.) y monitorear la temperatura del suelo en el desierto montañoso más alto de la Tierra.
El análisis del hielo subterráneo y el régimen térmico del regolito es particularmente importante en este ambiente árido, debido a la importancia del agua de deshielo (lagos de alta montaña, arroyos, procesos de deslizamientos periglaciales). Los macizos montañosos altos y típicamente libres de glaciares son "torres de agua congelada" del desierto. Las reservas de agua se encuentran en estado sólido, en forma de hielo subterráneo.
La presencia de agua de deshielo es esencial para las formas de vida de las altas montañas, pero este ambiente frío, seco, ventoso y con radiación UV crea condiciones de vida extremas. La adaptación, la prevalencia y la ecología de los microorganismos también son buenos indicadores de los cambios ambientales.
El procesamiento de datos sobre temperatura y nuestras conclusiones geomorfológicas, hidrográficas e hidrológicas son útiles para el sector de turismo, la protección de la naturaleza, la minería, construcción de caminos, etc.
El sitio de monitoreo de Ojos del Salado, donde se ha realizado el desarrollo y mantenimiento de instrumentos y el sistema de trabajo de campo multidisciplinario, no solo es la primera locación de nuestra red, sino también el valor de referencia para una base de datos representativa y de alta resolución.
